No habrá para ti otros dioses delante de mí. Por Susana Romanos
Preocupado por encontrar un lugar —«el lugar» como humano, intelectual y húngaro— se lanza a la búsqueda de un conocimiento universal a medio camino entre lo filosófico y lo teológico. Así, la historia de El hijo de Virgil Timár destaca la dualidad de la vida humana, en la que detrás del rostro humano visible hay huecos y profundidades.